No solo se cimbró la tierra en México, también lo hizo el alma de los mexicanos.



El despertar de un nuevo México. G. Puente Estrada



           El pasado 19 de septiembre se dio un sismo en la Ciudad de México y en algunos municipios de los Estados de México, Guerrero, Morelos, Oaxaca, Puebla y Tlaxcala. Se dio a conocer que la magnitud de este fue de 7.1 en la escala de Richter. Días antes, el 7 del mismo mes se dio otro sismo de menor cuantía. Los dos temblores que sacudieron a regiones del país dejaron al menos 355 muertos y daños estimados por unos dos mil millones de dólares, según cifras por actualizar. La S.H.C.P continúa proyectando un crecimiento económico del 2 al 3.0 por ciento para el próximo año 2018 y entre el 2.0 y el 2.6 por ciento para este 2017. Para atender la emergencia de los daños por el sismo, Hacienda liberó inicialmente 6, 500 M.D.P, este monto es parte de un estimado de 37.5 MMDP y crece hasta 72 MMDP incluyendo drenajes.

           La reconstrucción de las zonas afectadas será financiada a través del Fideicomiso Fuerza México que hasta la semana pasada tenía un recurso de 110 MDP. Este Fideicomiso tiene tres fines: el primero es la construcción y reconstrucción de vivienda, el segundo es la rehabilitación y restauración de patrimonio cultural y el tercero es el equipamiento e infraestructura que determine el comité técnico. El gobierno federal insiste que estos hechos no afectarán las cifras económicas ya que se impulsará la industria de la construcción en las zonas afectadas. Así mismo, la SHCP dio a conocer que se darán facilidades fiscales a estas regiones para diferir los pagos provisionales del ISR. La deducción inmediata de inversiones en bienes nuevos y otras más. Para la CDMX se hará un esquema especial en combinación con el gobierno de la ciudad. Hay que recordar que días antes de los sismos, estados de sureste del país sufrieron por el azote de huracanes  y en su momento reclamaron al país que no se olvidaran de ellos en los apoyos. Parece ser que estamos golpeando a la madre tierra y contaminando a diario, de tal forma que estos acomodos de la corteza terrestre y tanto huracán son un reclamo vivo.

              La reconstrucción se estima con cifras de primarias en 37.5 MMDP de los cuales se utilizarán 10 MMDP en viviendas en 11 entidades. 6.5 MMDP en Chiapas y Oaxaca. 8 en restauración y reconstrucción de edificios históricos. 13 para rehabilitar más de 10 mil escuelas. Se cuantifica la demolición de 1000 edificios en mal estado en las zonas afectadas. Lo que no se sabe es en que se utilizará el apoyo económico que se recibió de otras naciones, organizamos privados nacionales y extranjeros  así como de personas. Esto, suma mucho dinero y la ciudadanía está en espera del buen uso y su transparencia de estos recursos que no están bien cuantificados.

             Estos hechos marcaron un cambio en el país y no me refiero a lo económico y físico. México cambió junto con sus pobladores en lo cívico, en lo social y en su responsabilidad ciudadana. No solo en los voluntarios que trabajaron día y noche con la esperanza de salvar una vida. Enuncio el derroche de dinero que se otorga al INE y a los partidos políticos para sus gastos y prebendas. México vio con tristeza y enojo que quien “organiza” las elecciones solicitó que requería un incremento de recursos económicos, yendo de 18 MMDP a un nuevo monto de 25 MMDP y así garantizar la eficiencia en las elecciones. Traducido al lenguaje llano y sencillo: con más dinero sí las hacemos bien, “todo en aras de la democracia”. De ahí el reclamo nacional a este oneroso gasto en un país sumido en la pobreza y en la catástrofe. Creo que estos sismos y huracanes despertaron al México dormido y atarantado con el fut-bol. La conciencia civil despertó y no hay marcha atrás. Septiembre costó vidas y espero se recupere un país que sufre de corrupción e impunidad. Nos cimbró el alma.



P.D.  La fe sin duda, es sólo muerte. Miguel de Unamuno

 “CONSUMA LO HECHO EN MÉXICO Y ESTARÁ DANDO TRABAJO A MEXICANOS “
¡México es primero!   

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