Bajan impuestos en Estados Unidos.

La patria de cada hombre es el país donde mejor vive. Aristóteles. 

           Recientemente  se aprobó una reforma fiscal en el vecino país del norte, lo cual afecta a todo el mundo y en especial a México  ya que nuestra dependencia económica hacia esa nación es muy fuerte. Tenemos pendiente el finiquito de acuerdo o desacuerdo en el Tratado de Libre Comercio (TLC) cuyas pláticas se reanudarán la última semana de este mes y a los tres países involucrados nos conviene que este continúe bajo esquemas modernos y equitativos. Nuestro país le vende el 82% del total de nuestras exportaciones y cualquier movimiento o acuerdo erróneo nos afecta. También hay que tener presente que en la Unión Americana viven 34 millones de mexicanos y sus descendientes, de los cuales 11.5 millones no tienen documentación legal para vivir o trabajar en esa nación.

                 Ahora, bajo las condiciones y realidad mencionada, el primer triunfo del presidente Trump ante la Cámara de Representantes y el Senado es la aprobación a una disminución en el impuesto sobre la renta a empresas de un 35% que se imponía a un 21% a partir de este 2018. Este hecho, convierte a Estados Unidos en un paraíso fiscal ya que el monto que pagan las empresas transnacionales establecidas en México y que su domicilio fiscal e impuesto lo efectúan aquí, le van a pensar, ya que la diferencia impositiva es enorme. Puede suceder otro hecho y este es que las grandes empresas mexicanas también cambien su domicilio social al país vecino y paguen allá sus impuestos. Las empresas y los empleos seguirán en México porque así les conviene, pero no el monto impositivo a pagar.

               Este cambio se venía anunciando desde la campaña presidencial del Partido Republicano, sin embargo, el gobierno federal mexicano no movió un dedo para contrarrestar esta política que  en mucho nos afectará. Al no darse una rápida respuesta a este hecho, durante este año en número sencillos y solo con la diferencia de 14 puntos, México dejaría de percibir 210 mil millones de pesos y los contribuyentes norteamericanos solo en la clase media, se ahorrarían 62 mil millones de dólares que invertirán y consumirán en este país, originando una reactivación en su economía, la cual creció aproximadamente en el 2017 cerca del 3%. Es importante tomar en cuenta también que en México existen mayores deducciones que en USA pero aun así es más convincente a las empresas el optar por una baja tasa impositiva aunque tenga pocas deducciones, a un impuesto alto que cuente con muchas deducciones fiscales. Esta nueva tasa impositiva es menor a las utilizadas en Europa lo cual da un mensaje positivo a la inversión privada en ese país.

                 Este cambio en el porcentaje recaudatorio beneficia más a las grandes empresas, sin embargo, también ayuda en reducciones a todos los ámbitos, con combinaciones y estímulos diversos. Se estimula el ahorro y la inversión con esta disminución impositiva. Bajo este panorama, México tiene que replantear su esquema fiscal con una verdadera reforma que pueda contrarrestar la salida de un monto muy importante de recursos económicos que buena falta nos hacen para abatir la pobreza de 60 millones de mexicanos. Las políticas económicas deben ser de promoción y equidad. El tema fiscal es algo para incentivar la inversión productiva que genere riqueza y empleo. Es decir, bienestar social. La respuesta no debe tardar, esto urge. Un camino es el disminuir el Impuesto Sobre la Renta (ISR). Adelgazar y eficientar el gasto corriente en la Administración Pública. Compensar la disminución en la recaudación fiscal al existir la devolución del dinero habido por actos de corrupción. Es una situación grave que requiere una solución bien fundamentada y que tenga resultados positivos. La competencia es con la nación más poderosa económicamente hablando del mundo; Estados Unidos.

P.D.  Más mueven los ejemplos que las palabras. Séneca.

 “CONSUMA LO HECHO EN MÉXICO Y ESTARÁ DANDO TRABAJO A MEXICANOS “