El BITCOIN, realidad práctica o riesgo anunciado de una moneda.
El ambicioso y el bandido, se atraen como imanes. G. Puente Estrada
Recientemente se ha estado hablando mucho de
las monedas virtuales, digitales y una de estas criptomonedas se llama BITCOIN.
Esta moneda no existe físicamente, sin embargo, se acepta y reconoce como una
igual para pagos y transacciones en algunos establecimientos de países Europeos principalmente. La
intención en crear esta moneda es que se maneje en forma independiente del
gobierno y se permita hacer pagos electrónicos con rapidez y de forma anónima a
nivel mundial. Estas transferencias se manejan como un cambio de la titularidad
de la moneda.
Durante el
2017, el BITCOIN tuvo un sorprendente crecimiento en su valor, superando el
1000% de la inversión inicial. Se habla
de algunas personas que hace pocos años compraron por vía electrónica estas monedas y en poco tiempo han visto su
aportación a un negocio no tangible crecer en forma sorprendente. Ahora ¿Quién
respalda esta moneda? Pues no existe un gobierno o institución que muestre,
como lo es la exigencia del Banco Mundial y del Fondo Monetario Internacional,
que cualquier moneda de curso legal que emita (moneda o billete) una nación,
tiene que estar respaldada por: oro, plata, platino, piedras preciosas,
petróleo probado, monedas duras (dólar norteamericano, libra esterlina, etc.) que
den certeza de su valor para poder permitirse su circulación y aceptación en
cualquier tipo de transacción económica financiera.
En las
últimas semanas se ha presentado una inestabilidad del mercado de monedas
digitales donde el BITCOIN cayó por debajo de su punto base y está caída fue de
casi la mitad de su valor de referencia. Estaba por arriba de los 19,000
dólares y su registro fue hasta los US 10,000. Cuando se establece el BITCOIN,
es con la intención de adquirir bienes y servicios, pero ha generado mucho
“ruido” por parte de sus operadores y su precio se disparó durante el último
año, teniendo altibajos. La verdad es que la situación económica en el país y
en el mundo está muy tirante y más ahora que las decisiones del presidente de
la Unión Americana ponen en riesgo el TLC para América del Norte y provoca la
posición de Corea del Norte. Desdeña organismos de prestigio con el Tratado
Transpacífico, El Club de París (consejo mundial ecológico). Esto y más, ponen
de nervios a los capitales productivos. ¿Qué tan estables serán las inversiones
especulativas como una moneda que no tiene un respaldo gubernamental? En 1987,
la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), tenía cerca de 450 mil suscriptores, dando
u ofreciendo rendimientos de las acciones que cotizaban muy, pero muy por
encima de la media de utilidades que da una empresa industrial, comercial o de
servicios y “regulada” por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), de
un día para otro el gozo se fue al pozo y todos (menos los operadores)
perdieron la mayoría de su dinero invertido. Resultado: solo una persona fue
aprendida y encarcelada. Los demás operadores gozan de buena salud y gruesa
chequera. Existen otras monedas virtuales en el mercado como lo son: PEERCOIN,
RIPPLE, LITECOIN y DOGECOIN entre otras. ¿Quiere arriesgarse? Piénselo, cuando
lo decida. Vuelva a pensarlo. Yo no compraré.
P.D. Un buen gobierno da
respaldo y confianza a su moneda. G. Puente Estrada.
“CONSUMA LO HECHO EN MÉXICO Y ESTARÁ DANDO
TRABAJO A MEXICANOS “
¡México
es primero!
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